Un día más te despertaste
sola, igual que ayer,
igual que antesdeayer,
igual que siempre.
Hace tantas mañanas que se fue,
que al mirarte en el espejo
te preguntas por qué,
y la respuesta llega
fría como un cuchillo,
directa como un dardo al corazón:
es más joven que tú.
Y te cruzan por la mente
mil imágenes vividas
a su lado,
cuando todo era distinto,
cuando estaba enamorado,
y le tenías
en tus besos atrapado.
Y se llena tu mirada
de una lánguida tristeza
recordando
que hiciste tuyo su sueño,
ayudándole a subir
cada peldaño,
desde tu plano discreto
de mujer.
Un día más para enfrentarte
sola, a ser mujer
en un mundo que te
resulta extraño,
porque todo tu mundo
estaba en él.
Y te sientes un viajero
que ha perdido su tren,
y preguntas a nadie
por qué se fue con ella,
y la respuesta
no tarda en llegar:
es más joven que tú.
Y a pesar de las heridas,
le imaginas a tu lado
cada noche,
como cuando te quería,
cuando tu cuerpo era
joven todavía,
cuando el beso enamorado.
Y se llena tu mirada
de una lánguida tristeza
recordando
que hiciste tuyo su sueño,
ayudándole a subir
cada peldaño,
desde tu plano discreto
de mujer.
Y se llena tu mirada
de una lánguida tristeza
recordando
que hiciste tuyo su sueño,
ayudándole a subir
cada peldaño,
desde tu plano discreto
de mujer.