Ricardo Montaner - Amarte es mi pecado
Amarte como lo hice yo,
sin límite en el horizonte,
resulta siempre un juego peligroso,
porque al final el que más dio es el perdedor.
Amarte como lo hice yo,
vaciándome por ti la vida,
gasté cien mil palabras en el viento,
me entregué a cada momento
para hacerte feliz.
Amarte es mi pecado,
por no entender que nunca fuiste mía,
por las ganas de llenar este vacío,
que se formó entre el sentimiento y la razón.
Amarte es mi pecado...
Amarte como lo hice yo,
sin límite en el horizonte,
resulta siempre un juego peligroso,
porque al final el que más dio es el perdedor.
Amarte como lo hice yo,
vaciándome por ti la vida,
gasté cien mil palabras en el viento,
me entregué a cada momento
para hacerte feliz.
Amarte es mi pecado,
por no entender que nunca fuiste mía,
por las ganas de llenar este vacío,
que se formó entre el sentimiento y la razón.
Amarte es mi pecado...