Ten un plan
Si no tienes un plan, las circunstancias aleatorias harán un plan para ti, y seguramente no te va a gustar mucho.
Decide qué te gustarÃa que pasara, el éxito es tan sencillo como eso.
La energÃa y el tiempo puedes invertirlo para acercarte a tus sueños, o te pueden mantener al servicio de los sueños de alguien más.
Escoge seguir tus propios sueños, explora tus más profundos valores y objetivos.
Decide con precisión cómo te gustarÃa que fuera tu mundo y tu vida.
Los peores fracasos son el resultado de no tener una meta suficientemente clara y significativa.
Es importante saber exactamente a dónde tenemos la intención de ir, y es mucho más probable que lleguemos ahÃ.
Ten un plan, sÃguelo con persistencia y disfruta estar ahÃ, porque es ahà donde con sinceridad escogiste estar.
La razón que mantiene a tu objetivo fuera de tu alcance es que asumimos que éste es inalcanzable.
Eres capaz de hacer únicamente lo que crees que eres capaz de hacer. Hay sueños que no te atreves a soñar porque has decidido que no los puedes obtener. Si es asÃ, entonces tus expectativas negativas se convierten en una profecÃa auto cumplida.
Antes de abandonar o minimizar tus sueños más atesorados piensa en esto: cuando tu objetivo es significativo y poderoso, lo puedes alcanzar, no importa lo que sea.
Nunca se es demasiado viejo o demasiado joven, rico o pobre, para dirigir la energÃa de tu vida hacia un objetivo importante.
La vida se trata de hacer la diferencia, y eso es lo que puedes hacer, no importa cuáles sean las circunstancias.
Hay un lugar al que verdaderamente quieres ir, algo que sinceramente deseas conseguir en este preciso momento.
Tómate el tiempo para encontrarlo, y haz un esfuerzo por hacer que sucedan tus sueños.
Ése es uno de los regalos más grandes que puedes darle a tu vida.