Dios te necesita exactamente donde estás
Puede que no nos guste el ambiente en que estamos, el trabajo que hacemos, las personas con quienes vivimos y tratamos. Pero si escuchamos la voz de Dios dentro de nosotros, lo oímos decir: «Yo te he enviado. Yo he puesto mi Espíritu sobre ti. Yo te he creado a mi imagen y semejanza. ¿No sabías que estás donde estás porque ahí es que te mandé, donde te necesito, donde puedo usarte?»
Tan pronto empezamos a pensar que estamos donde estamos por una razón, tan pronto intuimos que Dios nos necesita exactamente donde estamos, miramos la vida de otra manera.
En lugar de hacer resistencia a las condiciones, empezamos a pensar: «¿Qué puedo hacer para mejoras las cosas? ¿Cómo expresar a Dios en esta situación?»
Con la comprensión de que estamos donde estamos para un propósito, podemos ser el medio de traer paz y comprensión donde ha habido discordia y disensión.
«Vosotros no me elegísteis, sino Yo os elegí a vosotros.» - Juan 15: 16.